El inicio de la crisis sorprende desprevenida a una fábrica de sillones de relax que acaba de acometer importantes inversiones inmobiliarias. Reajuste de personal y reconexión de departamentos. Adecuación de costes. Descentralización y eliminación de unidades de negocio no rentables. Adaptación a mínimos para su latencia. Análisis de diversificación del negocio.
Ante una reducción tan drástica de la empresa se perdieron las conexiones entre departamentos y la coordinación. Hubo que reeducar al personal para implicar más autonomía y crear la mentalidad de microempresarios para motivar y aumentar el rendimiento.